Comprender que la espiritualidad es el camino a la trascendencia personal y es la guía al cumplimiento del propósito de vida, adentrándose tanto a los fundamentos bíblicos y psicológicos de la teología transpersonal, conociendo además los aportes de las ciencias humanas y estableciendo un diálogo fecundo con formas contemporáneas de espiritualidad aun con las no cristianas, así el consejero este capacitado para el acompañamiento y formación de las vocaciones y en la orientación espiritual como el propósito de vida del ser humano.